Nos habíamos quedado cerca de la cumbre del Rigi,
admirando las vistas hacia el lago Küssnachter y con la intención de bajar
caminando un rato antes de coger el tren.
Aunque estamos tan altos que aún vemos el lago Zug.
Por el camino
encontramos varios restaurantes y hoteles de ambiente familiar. Algunos
pasajeros descienden con pequeñas maletas para pasar el fin de semana.
Voy
pasando por las estaciones que vi dese el tren. El azul para subir desde
Goldau, y el rojo que me llevará a Vitznau. En todas pregunto si puedo coger el
tren a Vitznau en la siguiente. Así practico el alemán y me garantizo que no
caminaré de balde.
Las vistas son siempre las mismas, pero no me canso de
admirarlas.
Aunque siempre encuentras a alguien que las tiene
mejor. Pensaba subir un pequeño vídeo, pero Blogger no está por la labor.
Yo me tengo que conformar con bajar en tren a la
impresionante velocidad de 12km/h. Claro que con estas pendientes no es
recomendable correr mucho más.
Poco a poco nos vamos acercando al lago y a Vitznau.
La siguiente etapa
de la excursión nos llevará a Lucerna en barco. Jubi, aún falta para el
bocadillo.