Zona arqueológica, monumento natural o paisaje de interés cultural, cualquiera de estas denominaciones puede servir para describir la excursión que os traigo hoy, esta vez dentro de España.
Siempre que comprimo las fotos, porque si no gastaría enseguida el espacio que nos ofrece Blogger, el color se ve alterado, pero nunca me había pasado de una forma tan descarada como con éstas. Espero, no obstante, que podáis haceros una idea del paraje natural a pesar de esos rojos tan artificiales.
Las Médulas están en Castilla y León, en la parte noroeste de la Península y el acceso es bien sencillo. Una vez allí, hay varios itinerarios perfectamente señalizados, pero es conveniente pasarse por el aula arqueológica para que nos aconsejen.
Las Médulas están en Castilla y León, en la parte noroeste de la Península y el acceso es bien sencillo. Una vez allí, hay varios itinerarios perfectamente señalizados, pero es conveniente pasarse por el aula arqueológica para que nos aconsejen.
Estas montañas fueron explotadas durante dos siglos por los romanos, en busca de oro, utilizando la presión del agua, que era introducida por canales y galerías excavados en la roca. El resultado es el que podemos observar en las fotos que siguen, unas montañas de las que apenas quedan unos restos, pero de gran belleza.
El paseo es muy cómodo, apto para todas las edades, aunque en verano puede hacer bastante calor, por lo que conviene protegerse del sol y llevar algo de agua.
Aquí se pueden observar algunas de las galerías por las que introducían el agua a presión. El procedimiento se llama ruina montium y no está claro cuánto oro lograron extraer. Parece que en torno a 750 toneladas.
Un ejército de árboles desnudos nos observa desde el borde del camino. Hay muchos castaños, plantados por los mismos romanos, y encinas. También se pueden encontrar gran número de aves, especialmente en el Lago de Carucedo.
Tomando la carretera que sale a la derecha según bajamos desde el aparcamiento se llega al Mirador de Orellán.
Para saber más podéis pinchar aquí.