sábado, 26 de abril de 2014

Anakena

“Un hombre llamado Hau-Maka tuvo un sueño y su espíritu se trasladó a Matakiterami. Abordó primeramente los tres islotes que se hallan al pie del volcán Rano Kao.

[…] Luego se fue a recorrer la isla en búsqueda de una bahía donde pudiese desembarcar el rey Hotu-Matua.”

Del libro Fantástica Isla de Pascua, de Francis Mazière, una joya difícil de conseguir ya que está descatalogado.



Según la tradición, la bahía que mencionan es Anakena y fue aquí donde arribó el rey polinesio Hotu Matu’a con su familia. Lo hizo en dos canoas de treinta metros de eslora en donde cabrían unas doscientas personas. No está nada claro cuándo se establecieron los primeros isleños, y el rango de fechas se extiende a lo largo de varios siglos, desde el año 300 hasta el 1200. Tampoco se conoce el motivo de su viaje aunque la tradición se refiere a un desastre natural, ya que “la marea alta lo destruyó todo”.

Nuestra llegada fue mucho más prosaica, por tierra y en un pequeño autobús cargado de turistas, bajo un cielo cubierto de nubes.





Pasamos junto a unas palmeras y nos acercamos al Ahu Nao Nao, el primero en ser restaurado en toda la isla.






Muy cerca hallamos el Ahu Ature, con su solitario moai.




Anakena es una de las pocas playas de arena coralina que encontramos en la Isla de Pascua. La otra playa no tenía acceso por tierra debido a un derrumbe y nos la perdimos.